
Al cabo de 3 Km, los olivares
pasan a ser los protagonistas del entorno, pero sólo hasta los Cascajares, donde
nos introducimos en una vega que fue de regadío y una de las zonas de pequeños
viñedos de la localidad.
Seguiremos caminando en busca de la
Sierra de Bascuñana y giraremos más adelante en dirección SE, para internarnos
en una vega que fue de viñedos y que progresivamente se irá estrechando hasta
las cercanías de la Fuente del Gallo. Pasaremos junto a un mirador, quedando
atrás los huertos para caminar ahora entre carrascas. Los nogales y otros
frutales cuidaban de estas antiguas viñas, ahora mudas por el abandono.

Desde allí afrontamos una fuerte subida por
pista hasta Cabeza Serranos, la zona más elevada del recorrido y excepcional mirador de la Alcarria, rodeados de un espeso pinar, que irá aclarando a medida
que descendemos por la otra vertiente hacia la Ermita de Santo Tomás, que nos
anunciará el último kilómetro del recorrido.
Cerca del pueblo nos acompañarán los
cultivos de secano; dejando a nuestra derecha el desvío de la variante de
recorrido corto.